Padres muy fusionados: cuando el amor de pareja deja poco espacio a los hijos
En muchas familias encontramos padres que han construido una relación de pareja muy unida. Hasta aquí, nada negativo: sentirse acompañados y apoyados es un pilar importante en la vida adulta. El problema aparece cuando esa unión se convierte en fusión. La fusión significa que la pareja funciona casi como una sola persona: piensan igual, deciden lo mismo, uno se adapta siempre al otro y, en ocasiones, toda la energía está puesta en mantener esa unión. Desde fuera puede parecer un matrimonio ejemplar, pero en la práctica los hijos pueden crecer sintiendo que no hay espacio propio para ellos. ¿Qué consecuencias puede tener en los hijos? Falta de validación individual: no se sienten vistos como personas únicas, sino como parte del engranaje familiar. Sensación de vacío interno: al no haber recibido una mirada diferenciada, pueden crecer con la sensación de que "algo falta". Dificultad para tomar decisiones: si el modelo siempre...