Del lenguaje va la cosa

 Esta semana comenzaba con la noticia sobre la aprobación del texto definitivo de la nueva edición de la "Ortografía de la Lengua Española", que fue presentada el domingo con la presencia de los titulares de las 22 Academias de la Lengua Española en la Feria del Libro de Guadalajara, México. Entre las nuevos cambios hay que señalar que el alfabeto pasa de tener 29 letras a 27 pues la ch y la ll desaparecen como tales y pasan a formar parte de la c y la l, respectivamente. En cuanto a la letra "i griega" que pase a llamarse "ye", ha quedado mas bien como una recomendación que como una imposicion. Lo mismo le sucede a la "uve" que los latinoamericanos podrán llamarla así en vez de "be baja o be chica" como le dicen ahora. Lo de suprimir la tilde en el adverbio "solo" también es una sugerencia aunque creo que traerá más lio porque distinguir entre el adjetivo y el adverbio en algunas ocasiones se hace cuanto menos difícil. Lo mismo sucederá con los pronombres personales demostrativos que también pierden la tilde. En definitiva, los académicos dicen que la última palabra la tenemos los hablantes y que el tiempo dirá como evolucionarán estas sugerencias para la comunicación.

Leyendo estas noticias pensé en la gran importancia que tiene el lenguaje para el desarrollo psicológico y cómo también existen factores psicológicos que influyen en el desarrollo del lenguaje.
Existen muchos trastornos del lenguaje y alteraciones que no responden a una causa orgánica sino que esta es psicológica. Siguiendo a Jordi Peña-Casanova en su libro "Manual de Logopedia" entre los factores psicológicos que influyen desfavorablemente en la evolución de la comunicación y el lenguaje están, por un lado, los más tradicionales como la ansiedad por separación prolongada, el rechazo o la sobreprotección materna y, por otro, los que afectan a la calidad y cantidad como puede ser un bilinguismo o trilinguismo exagerado.
Observamos, pues, que las relaciones con los niños influye de una manera muy decisiva en el desarrollo de su lenguaje. Por ejemplo, una madre excesivamente protectora o por el contrario que carezca de cercanía emocional con su hijo/a está ayudando a que en un futuro puedan existir problemas en su lenguaje o en su comunicación como dislexia, disortografía, hiperactividad, falta de atención, entre otros...
Actualmente, los recursos para hacer frente a estos problemas y alteraciones son bastantes efectivos y eficaces. Los logopedas, psicólogos, psicopedagogos y pedagogos se encuentran con las herramientas necesarias para hacer frente y solucionar dichos problemas. Sin embargo, cabe destacar, que la detección precoz es fundamental. El hecho de que el problema se detecte a tiempo influirá de manera decisiva en la buena evolución y solución del trastorno. Para ello, debemos confiar en los profesores que en la escuela o desde la guardería nos pueden orientar. La mayor parte del tiempo los niños están en el colegio y es ahí donde se puede observar mejor y detectar alguna alteración en el caso de que la hubiere.
En cuanto a los recursos que se puedan encontrar en internet, existen muchos tanto de artículos en diversos blog como en asociaciones que tratan un problema en concreto. A continuación pongo los enlaces de algunas asociaciones y blogs:

Para concluir, quiero decir que poco a poco iré comentando algunos de estos trastornos para que sea más fácil conocer los síntomas característicos y la forma de actuar en dichos casos y os animo a añadir el enlace de alguna página web....

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